Bartolomé Hernández Calvo, concejal del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Águilas, elevará al Pleno ordinario del mes de febrero una moción sobre las quemas agrícolas, a la que se ha sumado el Grupo Municipal Popular, en la que se instará al Gobierno de la Región de Murcia a:
Llevar a cabo diversas campañas de información por el territorio regional explicando a los agricultores interesados los pasos a seguir sobre la orden de 19 de octubre de 2017, de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, por la que se dictan las medidas fitosanitarias a adoptar en caso de acumulación de restos vegetales, así como sus posteriores modificaciones posteriores (Orden de 30 de diciembre de 2020).
En el marco legal que corresponda, y con el consenso de las asociaciones agrarias, regular de forma clara y concisa los procedimientos a seguir para la gestión de los residuos vegetales de origen agrícola.
Incluir en la próxima convocatoria prevista para 2020 de ayudas para la modernización de explotaciones agrarias una línea para la adquisición de trituradoras para titulares de explotaciones agrícolas.
Impulsar la creación de plantas de compostaje por comarcas y en relación actividad agrícola en cada zona.
Elaborar mecanismo para agilizar los trámites burocráticos y administrativos para las empresas que quieran crear plantas de gestión de residuos de origen agrícola.
Elaborar por parte de la consejería de agricultura un mapa regional de plantas de compostaje.
Asimismo, el pleno corporativo instará al Ayuntamiento de Águilas a:
La elaboración de un Bando municipal informando a las personas afectadas la sobre la Orden de 19 de octubre de 2017, de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, por la que se dictan las medidas fitosanitarias a adoptar en caso de acumulación de restos vegetales, así como sus modificaciones posteriores (Orden de 30 de diciembre de 2020).
Que el ayuntamiento de Águilas utilice todos los medios de comunicación a su alcance para dar a conocer el Bando citado en el punto anterior.
Los restos de podas agrícolas y los residuos de producciones de hortícolas bajo cubierta son residuos, eventualmente valorizables como subproductos, cuya quema es una actividad potencialmente contaminadora de la atmosfera. No obstante, la quema de restos agrícolas es una práctica tradicional en la gestión de los residuos de este origen siendo la única solución para evitar la propagación de determinadas plagas que afectan a muchos cultivos de nuestro entorno.
En consecuencia, su uso debe quedar bien regulado, jurídicamente, con el consenso del sector implicado, para evitar posibles interpretaciones erróneas de la normativa aplicable. Estableciendo el deslinde de competencias entre las distintas administraciones.
La competencia para la regulación del tratamiento de los residuos vegetales y las quemas agrícolas, en el marco de la legislación básica estatal, corresponde a la Comunidad Autónoma como administración competente en materia de agricultura, medio ambiente, y sanidad vegetal. Que debe regular esta actividad en colaboración con las administraciones locales.
Ante esta situación, se deben establecer mecanismos para la gestión de residuos vegetales con el ánimo de facilitar la gestión a los actores implicados buscando fórmulas sostenibles y que reduzcan el impacto ambiental que su eliminación pudiera generar.
Dado que el problema de las quemas agrícolas es un asunto transversal que compete a tres ámbitos competenciales de la CARM, es necesario abordar su regulación de forma integral y definitiva, máxime si se atiende al mandato de "integración de la protección de la atmósfera en las políticas sectoriales" contenido en el artículo 18 de la Ley 34/2007, de 15 de noviembre, de calidad del aire y protección de la atmósfera.