"Hemos hecho una apuesta clara por el uso de dos vehículos con GLP (gas licuado del petróleo). De esta forma, conseguimos una reducción clara de los costes de mantenimiento, no dejamos restos de carbonilla que ensucien el aceite, hay menos averías y lo más importante es que conlleva una importancia reducción de la contaminación ambiental", explica la edil de Empresas Prestadoras de Servicios, Isabel Fernández.
Unos turismos que actualmente se están usando en el servicio de parques y jardines para tareas cotidianas y de gran uso como son la gestión de residuos y sus variantes: restos del corte de césped, poda de arbustos, la realización de balonas o, entre otras, el movimiento de distinta maquinaria de un punto a otro del municipio.
Este combustible, por el que ha apostado el Ayuntamiento y la empresa concesionaria STV Gestión, supone un 36% menos de emisiones de CO2 que el carbón, un 15% menos que usar gasolina y un 10% también por debajo si lo comparamos con un diésel.
Además, recuerda Fernández, supone un ahorro para las arcas municipales ya que por el mismo servicio se produce un ahorro de cuatro céntimos por kilómetro con respecto a la gasolina (según el informe de la Asociación Española de Operadores de GLP).
Pero hay más ventajas para los ciudadanos como la reducción a la mitad del ruido que produce un coche diésel, sumado a un menor coste por mantenimiento respecto a los turismos de gasolina, ya que tiene menos vibraciones.
De esta forma, desde el Consistorio se sigue apostando por el cuidado ecológico de nuestro municipio a la vez que se desarrollan las tareas habituales de embellecimiento y mantenimiento de las distintas zonas verdes.